No obstante, nuestro escenario para 2022 se verá condicionado por la intensidad,
duración y alcance de los efectos del virus Covid-19 en la economía mundial.
Soldecanarias.net / Adeje
Mohamed Jamil Derbah estima que la economía canaria podría crear 38.000 puestos de trabajo. Esto puede permitir que el número de ocupados supere los 940.000, lo que situaría el empleo en Canarias en su nivel más alto, un 6% por encima del máximo alcanzado antes de la crisis. Este volumen de empleo es consistente con una previsión del PIB que se desacelera hasta el 1,1%, pero que recuperó el tono en 2021, con un aumento del 1,8%. En todo caso, el escenario para 2022 se verá condicionado por la intensidad, duración y alcance de los efectos del virus Covid-19 en la economía mundial y, en particular, en Europa y en España.
Derbah recordó que la economía canaria habría mantenido un incremento cercano al 0,4% trimestral, para desacelerarse hasta el 0,2% a partir del tercer trimestre del año pasado, un aumento inferior al del conjunto de España. Con ello, el crecimiento de la economía regional se habría ralentizado hasta el 1,5% anual, cinco décimas por debajo de la media nacional.
Señaló varios factores que explican este debilitamiento de la economía canaria. Por el lado de la demanda interna, se observó un menor dinamismo del gasto de los hogares canarios, en particular de la compra de bienes duraderos. A ello se ha unido, el deterioro reciente de los indicadores de inversión productiva y residencial. El esfuerzo en la mejora del capital se ha visto afectado, por el incremento de la incertidumbre, lo que se debe, entre otros factores, a los cambios regulatorios. Sin embargo, el moderado impulso fiscal, habría atenuado, en parte, esta desaceleración de la actividad, con un incremento de renta a los hogares como consecuencia del incremento del empleo público, del aumento de los salarios de los funcionarios y de las pensiones.
En cuanto a la demanda externa, también se observa en Canarias una pérdida de dinamismo. Por el lado de los bienes, las exportaciones se han reducido en un 6,1%, principalmente por las menores ventas al exterior de productos energéticos, que representan el 63% de las exportaciones del archipiélago.
Por su parte, en el sector turístico, tras ocho años consecutivos de crecimiento, se observa una contracción de gasto de los extranjeros en Canarias. Principalmente, ello se debe a una caída del del número de pernoctaciones. Este comportamiento viene marcado por distintos acontecimientos, entre los que destacan la desaceleración de la economía europea y en particular la alemana; la incertidumbre por la salida de Reino Unido de la Unión Europea; y la recuperación de los mercados competidores, cuyo impacto se nota más en el turismo de playa y en los hoteles de menor categoría. Si la incidencia de lo anterior ya es mayor en las islas, hay que añadir que a lo largo del otoño se observaron otros ‘shocks’ específicos para el turismo que se han traducido en una reducción de las plazas de vuelo y que ha continuado.
Por el contrario, aumentó el turismo nacional procedente principalmente, de las islas y Madrid, aunque no pudo compensar la caída del extranjero. El cambio en las características del visitante (menos extranjeros, más pernoctaciones en hoteles de y cinco estrellas), se traduce en un impacto diferencial sobre el turismo de las islas: Tenerife es la que muestra una menor corrección de las pernoctaciones.
La economía canaria podría acelerarse
Hacia delante, Derbah prevé que la ralentización de la actividad en Canarias continúe también. No obstante, nuestro escenario para 2022 se verá condicionado por la intensidad, duración y alcance de los efectos del virus Covid-19 en la economía mundial.
El crecimiento del consumo de las familias canarias seguirá mostrando un crecimiento moderado durante este año, en un contexto en el que tanto la demanda embalsada durante la crisis como las políticas expansivas de años anteriores dejan de actuar como soporte del crecimiento. No obstante, el aumento de la renta, el dinamismo de la financiación al consumo, así como la menor incertidumbre que en años anteriores podrían impulsar el consumo de los hogares en próximos trimestres.
38.000 nuevos empleos en Canarias
De cumplirse el escenario previsto, indica Derbah, se prevé la creación de unos 38.000 puestos de trabajo, hasta lograr al final del periodo los 970.000 ocupados, un 6% más que el máximo alcanzado antes de la crisis. Con ello, la tasa de paro promedio se reduciría hasta el 19,3% en 2021, todavía 2 puntos porcentuales por encima de su nivel en 2008, y 7 puntos por encima del valor previsto para España a finales de este año.
Los primeros datos apuntan a una ligera mejora del mercado laboral canario apoyada por el avance en el sector de la hostelería. Sin embargo, la región debería impulsar la formación e inserción laboral de aquellos colectivos con más dificultades, jóvenes que ni estudian ni trabajan y parados de larga duración entre otros.
Moderada reducción de las incertidumbres
El asesor internacional y empresario hotelero señaló que aunque los riesgos del escenario son a la baja, la velocidad futura de la recuperación dependerá de la resolución de los distintos focos de incertidumbre y de las políticas que se implementen.
En el escenario global, la incertidumbre se reduce, lo que favorece a Canarias por su mayor exposición al mercado británico en gastos turístico y mercado inmobiliario. Además, la posible reducción de las tensiones comerciales entre EEUU y China facilitará la recuperación de los flujos comerciales globales, aunque los artículos afectados representan una parte reducida de las exportaciones canarias. Sin embargo, el brote de virus Covid-19 afecta a la economía mundial justo cuando las perspectivas de crecimiento estaban mejorando, lo que supone un riesgo a la baja adicional.
En el caso canario, la extensión de la epidemia del coronavirus, que podría afectar, especialmente, al turismo y el transporte aéreo, y por tanto, añade un riesgo a la baja sobre la previsión, que es mayor (por su especialización) en Canarias. En todo caso, se espera que su duración sea limitada. Por tanto, en la medida que las actuales incertidumbres se vayan resolviendo, la recuperación de la economía europea y la leve mejora del entorno internacional podrían favorecer la moderada aceleración de la economía para 2022.
Con todo, según Derbah, la economía canaria y la española se encuentran mejor preparadas para afrontar un escenario de incertidumbre, ya que muchos de los desequilibrios que retroalimentaron los efectos de la última crisis se han reducido. Sin embargo, en ausencia de reformas eficientes, el crecimiento potencial de la economía estaría convergiendo a niveles menores que los observados al inicio de la recuperación.