Con más de 700 personas sin hogar y los recursos al límite, Bermúdez pide ayuda al Gobierno de Canarias y advierte que acudirá a los tribunales si persiste la “insolidaridad institucional”.
Soldecanarias.net / Santa Cruz de Teneerife
La crisis del sinhogarismo en Santa Cruz de Tenerife ha llegado a un punto límite. El Ayuntamiento capitalino ha decidido elevar la voz y pedir amparo a la Diputación del Común tras constatar un aumento constante de personas sin hogar en sus calles y denunciar que otros municipios de la Isla estarían derivando a sus vecinos más vulnerables hacia la capital, incluso costeando estancias en recursos locales.
Según los datos municipales, entre enero y agosto de 2025 el servicio de Atención a Personas Sin Hogar ha atendido a 732 personas, de las cuales más de la mitad (55%) proceden de otros municipios. “Santa Cruz no puede seguir siendo el único municipio que asume esta realidad sin apoyo del resto”, subrayó el alcalde, José Manuel Bermúdez, que calificó la situación de “insostenible”.
La red municipal de alojamiento se encuentra prácticamente colapsada, con una ocupación del 98,7% y más de 1.300 solicitudes denegadas por falta de plazas. Además, 27 de las plazas actuales están ocupadas por personas que deberían estar en centros sociosanitarios dependientes del Gobierno de Canarias, mientras que 39 personas esperan ser derivadas sin éxito.
Uno de los aspectos más alarmantes es la salud mental: el 30% de los usuarios presenta diagnósticos o indicios de patologías psiquiátricas. “No es lógico que alguien con una crisis aguda sea atendido en un hospital y vuelva a la calle al día siguiente”, denunció Bermúdez, quien reclama pisos tutelados, mini residencias y atención específica para este colectivo.
El alcalde afirmó que, pese a haber incrementado el presupuesto de Servicios Sociales a 36 millones de euros y lograr que 178 personas abandonaran la calle en el último año, el esfuerzo municipal “no es suficiente si otras administraciones miran hacia otro lado”.
“Si esta situación continúa, acudiremos a los tribunales. No podemos permitir que la capital soporte sola un problema que es de toda la Isla”, advirtió Bermúdez, que también pidió celeridad judicial y una reforma legal para proteger a las personas con enfermedad mental grave que viven sin atención en la calle.
Santa Cruz busca ahora el apoyo del Cabildo, el Gobierno de Canarias y los ayuntamientos vecinos para repartir la atención social y frenar un efecto llamada que amenaza con cronificar el sinhogarismo en la capital.
