La líder del PP regresa al poder tras seis años en la oposición gracias a una moción de censura avalada por 12 concejales. La decisión evidencia la fractura interna en el actual grupo de gobierno.
Soldecanarias.net / Güimar
Carmen Luisa Castro Dorta vuelve a ser alcaldesa de Güímar. Este lunes, seis años después de abandonar el gobierno local, la dirigente del Partido Popular ha logrado revalidar su poder gracias a una moción de censura respaldada por los nueve concejales del PP, dos ediles socialistas —José Miguel Hernández y Patricia Encinoso— y el único representante de Nueva Canarias, Carlos Llarena. Con un total de 12 apoyos de los 21 miembros del pleno, la moción ha prosperado y ha dado paso a un nuevo ejecutivo municipal.
La iniciativa, registrada el pasado 28 de julio, ha contado con el voto afirmativo de los tres ediles firmantes ajenos al PP, a pesar de que tanto el PSOE como Nueva Canarias anunciaron su expulsión. Sin embargo, estos concejales mantendrán por ahora su estatus en el gobierno local hasta que los respectivos expedientes de expulsión se resuelvan. En el caso de Llarena, la medida no tiene efecto inmediato ya que no está afiliado formalmente al partido.
Castro ha explicado que los concejales del PSOE no son tránsfugas, sino representantes «distanciados de la gestión del alcalde» Gustavo Pérez. Según la portavoz del PP, el mal funcionamiento del Ayuntamiento, el deterioro de los servicios públicos, la inseguridad ciudadana y una gestión marcada por retrasos, conflictos y una supuesta investigación judicial, han motivado la moción.
“Esto no es una maniobra de poder; es una respuesta necesaria ante un Ayuntamiento paralizado”, afirmó Castro.
La alcaldesa confirmó que Hernández, Encinoso y Llarena asumirán responsabilidades en áreas como Servicios Municipales, Fiestas y Deportes, conservando funciones similares a las que ya desempeñaban. Aunque puedan ser expulsados de sus partidos, seguirán en sus cargos y percibiendo sus retribuciones actuales mientras no haya cambios en sus delegaciones.
Un gobierno dividido y en crisis
El actual pacto de gobierno entre Coalición Canaria y el PSOE, firmado tras las elecciones de 2023 con el respaldo de Unidas Sí Podemos, queda así desmantelado. El acuerdo daba a Gustavo Pérez (CC) la Alcaldía durante los cuatro años de legislatura, tras un reparto anterior que alternó a Airam Puerta (PSOE) y al propio Pérez en el periodo 2019-2023. Sin embargo, la división interna, la falta de coordinación entre socios y una creciente percepción de desgobierno han alimentado el malestar.
Castro ha acusado a los anteriores responsables de “dejar colapsar el Ayuntamiento”, con problemas como la crisis en la Policía Local, obras paralizadas, fiestas alteradas por falta de seguridad, y un modelo administrativo que aún opera bajo teletrabajo. También mencionó investigaciones judiciales por supuestas irregularidades en proyectos como Las Bajas o Golete, y denuncias ante Fiscalía por un presunto decreto falso.
Una figura política siempre polémica
Militante del PP desde hace más de una década, Carmen Luisa Castro ya fue alcaldesa de Güímar entre 2013 y 2019. Alcanzó el cargo en 2013 tras su primera moción de censura contra el socialista Rafael Yanes. Su gestión ha estado marcada por decisiones controvertidas, desde propuestas urbanísticas ambiciosas hasta polémicas mediáticas, como la visita con fondos públicos al plató de Sálvame o su defensa de trasladar el monumento franquista del Valle de los Caídos a Güímar como reclamo turístico.
En 2015 se quedó a solo 27 votos de la mayoría absoluta y, tras perder el gobierno en 2019, lideró la oposición con una base electoral firme: en 2023 volvió a ser la fuerza más votada, con nueve concejales y casi el doble de apoyos que CC o el PSOE. Hoy, regresa al frente del Ayuntamiento con la promesa de dar a Güímar “dos años de cambio” y de afrontar el reto de un plan económico y financiero aún por desarrollar.


