La denuncia fue presentada en su día por un edil socialista
FUENTE: EDDC.NET
La historia de los escoltas a esta concejala tiene miga. Todo comenzaba con su decisión de cambiar el rumbo de la historia en el Ayuntamiento y darle otra vez la vida y la gloria al ahora alcalde nacionalista José Manuel Bermúdez y hacer caer a Patricia Hernández.
Se consideró en aquel momento y se llevó a cabo. Es verdad que no existía ni existía un servicio de escoltas como tal y que se pidió, a través de una nota voluntarios para protección de autoridades, donde se presentaron diez, que es parte de las funciones de la Policía Local y se encargó igualmente un estudio de seguridad para valorar si necesitaba esa protección o no. Lo cierto es que la concejala usaba ese servicio para que la llevasen en coche oficial a cosas privadas, incluyendo desplazamientos a un colegio, usando un sillín que tenía la entonces alcaldesa socialista, que ella mismo denunció como inconveniente, pero que no tuvo el más mínimo reparo de hacerlo.
Alonso disfrutó de ese servicio de escolta desde antes de la moción de censura, que se le asignó sin el conocimiento de los superiores de los mandos policiales, y que, en una reunión mantenida con la Delegación del Gobierno días antes del pleno de la censura, no existía ninguna petición (obligatoria para autorizar escoltas a un cargo público) en la citada administración. Esa asignación de escolta a Alonso supuso retirar a los policías de otros servicios, “como por ejemplo los de violencia de género o los de menores”.
Se le pidió que mostrará informes sobre esta asignación y no fue posible o en su caso la concejala no los exhibió dentro y fuera del pleno. Dicha ausencia fue lo que motivó una denuncia y que Fiscalía iniciará una investigación sobre este asunto. Pero lo que ha pasado es que ese servicio siguió sin problema, a pesar de los pesares, por parte de la entonces y ahora concejala de Seguridad y movilidad, aunque ahora ella misma dispone de un propio servicio de escolta, en otro ámbito y que, afortunadamente para ella, no la llevará a ningún juzgado.
