El Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas libias subraya la protección del ciudadano como “línea roja” y llama a una coordinación urgente para preservar la estabilidad financiera y de servicios en el país.
Soldecanarias.net / Adeje
Bengasi fue escenario de una reunión de alto nivel en un momento crítico para Libia. El Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas, mariscal del Estado Mayor de Guerra Khalifa Abulqasim Haftar, recibió en la sede del Comando General a una delegación de responsables civiles, financieros y de seguridad para abordar las graves crisis de inundaciones y escasez de combustible que afectan a amplias zonas del país.



En el encuentro participaron el presidente del Gobierno libio, Dr. Assama Hamad; el jefe del Servicio de Seguridad Interna, Assama Al-Darsi; el vicegobernador del Banco Central de Libia, Marai Al-Barasi; y el portavoz del Ministerio del Interior, general Faraj Qaim. La reunión se centró en el análisis de las causas estructurales y coyunturales de las crisis actuales, así como en la evaluación de medidas inmediatas y a medio plazo para mitigar su impacto sobre la población.
Según fuentes oficiales, los asistentes examinaron los mecanismos de coordinación entre las instituciones del Estado, con el objetivo de garantizar la estabilidad financiera, la continuidad de los servicios básicos y el suministro regular de combustible. Asimismo, se destacó la necesidad de una respuesta integrada que combine seguridad, gestión económica y acción humanitaria, en un contexto marcado por la fragilidad institucional y las consecuencias acumuladas de años de conflicto.



El mariscal Haftar fue enfático al señalar que “la fuerza del ciudadano representa una línea roja que no se puede tocar”, una declaración que busca enviar un mensaje tanto a las instituciones como a los actores económicos y de seguridad. En este sentido, insistió en la urgencia de identificar las verdaderas causas de la crisis de liquidez y combustible, y de adoptar soluciones inmediatas que protejan los intereses y el bienestar de la población.
La reunión refleja los esfuerzos de las autoridades del este de Libia por proyectar una imagen de control y coordinación frente a una comunidad internacional atenta a la evolución de la situación. En un país clave para la estabilidad del norte de África y del Mediterráneo, la capacidad de las instituciones libias para responder a estas crisis será determinante no solo para aliviar el sufrimiento de los ciudadanos, sino también para reforzar la confianza interna y externa en el futuro del Estado libio.


