Tras el retiro de ayuda militar de EE.UU., los líderes europeos buscan una estrategia unificada para frenar a Rusia
Soldecanarias.net / Redacciòn
La decisión de Donald Trump de suspender la ayuda militar a Ucrania ha generado una oleada de preocupación en Europa. Líderes europeos se han movilizado rápidamente en reuniones de emergencia para definir el futuro del apoyo a Kyiv y, en un sentido más amplio, la seguridad del continente frente a la amenaza rusa.
Una Europa sin EE.UU.: el cambio de paradigma
Desde la Segunda Guerra Mundial, Washington ha sido el principal garante de la seguridad europea. Sin embargo, con la reciente postura de la administración Trump, marcada por el escepticismo hacia el apoyo incondicional a Europa, muchos líderes han comenzado a considerar seriamente un cambio de estrategia. Friedrich Merz, el probable próximo canciller de Alemania, advirtió que EE.UU. parece haber dejado de preocuparse por el destino de Europa, lo que deja al continente en una encrucijada geopolítica.
El Reino Unido ha liderado el esfuerzo diplomático con reuniones de alto nivel en Londres, mientras que París y Bruselas han sido testigos de intensas negociaciones sobre el futuro de la seguridad europea. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, instó a convertir a Ucrania en un «puercoespín de acero», con el envío urgente de más armas y apoyo logístico.
Tensiones entre Ucrania y EE.UU.
El reciente encuentro entre Trump y el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky en la Casa Blanca fue tenso y terminó sin la firma de un acuerdo sobre recursos minerales estratégicos. Trump acusó a Zelensky de «jugar con la Tercera Guerra Mundial», dejando en el aire el futuro del respaldo estadounidense a Kyiv. Zelensky, en respuesta, hizo un llamado a la creación de un ejército europeo que pueda responder a la amenaza rusa sin depender de Washington.
¿Puede Europa actuar como un bloque unificado?
La gran pregunta que se cierne sobre el continente es si los países europeos pueden actuar con una sola voz. La realidad es que Europa es una unión de naciones con economías, políticas y prioridades diferentes. Mientras que algunas naciones han aumentado su gasto en defensa, otras se resisten a comprometer mayores recursos en una guerra prolongada.
La cumbre de emergencia de la UE prevista para este jueves será crucial para determinar si el continente puede estructurar un plan de defensa coherente. La urgencia es clara: no solo está en juego la soberanía de Ucrania, sino el equilibrio de poder en Europa y la estabilidad de la región en los próximos años.


