Venta ambulante ilegal, suciedad en las calles y delincuencia organizada generan preocupación entre comerciantes y hosteleros, que reclaman una respuesta inmediata de las administraciones.
Soldecanarias.net / Redacciòn
La situación en los principales núcleos turísticos del Sur de Tenerife preocupa cada vez más a comerciantes y hosteleros. Denuncian que la proliferación de la venta ambulante no regulada, unida al incremento de la inseguridad y a la falta de limpieza, está deteriorando la imagen del destino y poniendo en riesgo la actividad económica de la zona.
Los empresarios insisten en que no rechazan la venta ambulante como actividad, pero reclaman que se practique en lugares regulados y fuera de las áreas donde operan negocios que cumplen con la normativa y sostienen empleo estable. “Estamos ante una competencia desleal que nos resta competitividad y pone en peligro miles de puestos de trabajo”, señalan desde el sector.
A las pérdidas económicas se suman los problemas sociales: delitos contra la propiedad intelectual, tráfico de drogas en entornos turísticos, reaparición de la prostitución y robos cometidos por grupos organizados que operan con impunidad. Algunos centros comerciales incluso se han visto obligados a cerrar baños para evitar el consumo de sustancias en su interior.
Ante la falta de coordinación entre cuerpos policiales, cada vez más empresarios han optado por contratar seguridad privada, tanto para proteger sus establecimientos como para ofrecer a los clientes un ambiente seguro que, según denuncian, ya no encuentran en la vía pública.
El Círculo de Empresarios y Profesionales del Sur de Tenerife (CEST) exige a las administraciones públicas medidas urgentes que garanticen la seguridad, la limpieza y el orden en las zonas turísticas. “No podemos permitir que la pasividad institucional dañe la reputación internacional de nuestro destino ni comprometa el futuro económico de miles de familias”, advierten.


