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Un año después de la devastadora inundación causada por la tormenta Daniel, el Gobierno de Libia inaugura grandes proyectos de desarrollo y servicios en la ciudad de Darna, destacando el esfuerzo por restaurar la vida normal a través de un ambicioso plan de reconstrucción.
En una ceremonia cargada de simbolismo y esperanza, el primer ministro libio, Dr. Osama Hamad, asistió a la «Noche del Jazmín» en la ciudad de Darna, un evento que refleja el avance de los esfuerzos por revitalizar una región devastada por la tormenta Daniel hace un año. La ciudad, una de las más golpeadas por las inundaciones, está presenciando la puesta en marcha de varios proyectos de desarrollo y servicio, los cuales representan un paso crucial en su recuperación.
La ceremonia, que tuvo lugar en el complejo deportivo de Darna, no solo celebró la apertura de nuevas infraestructuras sino que también fue una muestra clara de la voluntad política del gobierno libio de acelerar el proceso de reconstrucción. Acompañado por altos funcionarios, incluido el Director General del Fondo de Desarrollo y Reconstrucción de Libia, el Ingeniero Abul Qasim Haftar, y el comandante de la zona militar, Abdul Basit Bogris, el Primer Ministro subrayó que la reconstrucción de Darna no solo es una prioridad nacional, sino un símbolo de resiliencia para el país.
«Este es un momento crucial en la historia de Libia. La recuperación de Darna es una muestra del compromiso del gobierno por no dejar atrás a ninguna de nuestras ciudades en este proceso de reconstrucción», señaló el Dr. Hamad en su discurso. Las autoridades locales y los habitantes de Darna, presentes en gran número, compartieron el optimismo ante los avances visibles en la infraestructura y los servicios públicos.
La tormenta Daniel, que afectó gravemente la región en 2023, dejó a su paso una estela de destrucción, pero también impulsó una respuesta coordinada a nivel nacional e internacional para reconstruir lo perdido. Desde entonces, el gobierno ha lanzado una serie de iniciativas para restaurar tanto la economía local como las condiciones de vida de los ciudadanos.
La «Noche del Jazmín», concebida como una celebración cultural, ha servido como recordatorio de la capacidad de Libia para sobreponerse a las adversidades, a la vez que subraya el papel vital de la cooperación entre el Estado y los residentes en este renacimiento urbano. Con la inauguración de los nuevos proyectos de infraestructura, Darna está comenzando a dejar atrás los ecos del desastre, buscando un futuro más prometedor y estable.
La reconstrucción de esta ciudad costera se ha convertido en un tema clave en la agenda política del gobierno de Libia, que ahora busca fortalecer su imagen tanto a nivel nacional como internacional a través de una gestión eficaz y rápida de la recuperación.
