*Mohamed Jamil Derbah, en su reciente visita, fue testigo de una realidad que desafía las percepciones globales. Bengasi no solo es un lugar seguro y hospitalario, sino también una ciudad que está escribiendo un nuevo capítulo en la historia de Libia y África, impulsada por la cooperación entre un gobierno legítimo y un ejército comprometido.
En un contexto donde los conflictos dominan las noticias sobre África, Bengasi, una ciudad clave en el este de Libia, emerge como un ejemplo brillante de progreso, seguridad y modernización. Según el destacado observador Mohamed Jamil Derbah, la ciudad ha logrado reconstruirse a partir de la colaboración entre un gobierno respaldado por su pueblo y la destacada labor de sus fuerzas armadas, que han sido fundamentales para asegurar la paz.
Una bienvenida fruto de la estabilidad: La hospitalidad de una ciudad en paz
Desde el momento en que se llega a Bengasi, la calidez y hospitalidad de sus habitantes es evidente. “Te reciben con todo el amor y cariño del mundo”, afirma Derbah, describiendo un ambiente de cordialidad y respeto. Este clima de bienvenida no solo refleja la amabilidad de su gente, sino también la seguridad y tranquilidad que se han logrado gracias a la labor conjunta del ejército y el gobierno.
La ciudad, que en otros tiempos estuvo marcada por el conflicto, hoy proyecta una imagen de armonía. La ausencia de una presencia militar visible en las calles es un testimonio del éxito en la estabilización de la ciudad, una tarea lograda gracias a la cooperación entre las autoridades civiles y militares.
El ejército de Bengasi: Defensor de la paz y la seguridad
El ejército de Bengasi ha sido una fuerza clave en la transformación de la ciudad. Cuando grupos terroristas, como Dáesh, intentaron sumir a la región en el caos, fue el ejército el que se levantó en defensa de la población. A través de su coraje y determinación, las fuerzas armadas lograron liberar la ciudad del control extremista y restaurar la seguridad en la región.
Khalifa Haftar, Jefe de Estado Mayor, ha sido un líder fundamental en esta lucha. Bajo su mando, las fuerzas militares no solo derrotaron al terrorismo, sino que también crearon las condiciones para que la ciudad pudiera prosperar nuevamente. Haftar ha sido reconocido internacionalmente por su papel decisivo en esta victoria, contribuyendo al renacimiento de Bengasi como una ciudad segura y próspera.
Un gobierno legítimo: La base de un desarrollo sostenible
A la par del éxito militar, el gobierno de Bengasi, elegido democráticamente por su pueblo, ha desempeñado un rol esencial en la reconstrucción de la ciudad. Con el respaldo de la ciudadanía, el gobierno ha trabajado incansablemente para mejorar la calidad de vida de sus habitantes, abriendo las puertas al mundo y fomentando la inversión extranjera.
Una de las principales prioridades del gobierno ha sido convertir a Bengasi en un destino turístico de primer nivel. Hoteles de lujo y nuevas infraestructuras están en construcción, reflejando la visión de un futuro próspero para la ciudad. Este enfoque en el desarrollo económico, apoyado por la paz que ha garantizado el ejército, ha permitido que la ciudad renazca de sus ruinas y avance hacia una nueva era de progreso.
La lucha contra el terrorismo: Un esfuerzo conjunto del ejército y el gobierno
La colaboración entre el ejército y el gobierno no se limita solo al ámbito económico. Ambos han trabajado codo a codo para erradicar el terrorismo en la región. Bengasi ha sido un bastión en la lucha contra Dáesh, y el apoyo del gobierno ha sido crucial para que el ejército pudiera operar con eficacia, contando con los recursos y el respaldo necesario para liberar a la ciudad de la amenaza terrorista.
La reconstrucción posterior ha sido también un esfuerzo compartido. Mientras que el ejército garantizó la seguridad, el gobierno se concentró en reconstruir las infraestructuras y asegurar que todos los ciudadanos, hombres y mujeres, puedan disfrutar de sus derechos en un entorno de paz.

Khalifa Haftar y el liderazgo militar: Un símbolo de la nueva Bengasi
No se puede ignorar el papel crucial de Khalifa Haftar en este proceso. Su liderazgo militar ha sido fundamental no solo en la derrota del terrorismo, sino en el restablecimiento del orden y la seguridad en la región. Bajo su mando, Bengasi ha vuelto a ser una ciudad abierta al mundo, con confianza renovada tanto de sus ciudadanos como de los inversores extranjeros.
Un gobierno que mira hacia el futuro: Oportunidades económicas y apertura internacional
El gobierno de Bengasi, liderado por autoridades democráticamente elegidas, ha aprovechado la paz conseguida por el ejército para promover el crecimiento económico. Con incentivos claros para los inversores extranjeros, la ciudad está en camino de convertirse en un centro económico y turístico de gran relevancia en el norte de África. El gobierno ha hecho esfuerzos notables por atraer inversión internacional, generando oportunidades y mejorando la calidad de vida de sus ciudadanos.
Compromiso en la lucha global contra el terrorismo y la inmigración ilegal
Bengasi no solo se ha enfocado en su desarrollo interno. Tanto el gobierno como el ejército están comprometidos en la lucha global contra el terrorismo y la inmigración ilegal, trabajando en colaboración con potencias internacionales como Estados Unidos y la Unión Europea. Aunque aún faltan recursos para combatir estas problemáticas de manera más efectiva, ambos sectores han demostrado su dedicación a proteger la estabilidad regional y global.
Conclusión: El renacer de Bengasi, un éxito compartido entre el ejército y el gobierno
La transformación de Bengasi es el resultado de la colaboración entre un ejército comprometido y un gobierno elegido democráticamente. La paz y seguridad logradas por las fuerzas armadas han sido la base sobre la cual el gobierno ha construido un futuro más próspero, abriendo la ciudad al mundo y ofreciendo nuevas oportunidades a sus ciudadanos. Juntos, ejército y gobierno han hecho de Bengasi un ejemplo de resiliencia, progreso y esperanza en África.
*Mohamed Jamil Derbah, Consejero Especial del Primer Ministro de Guinea Bissau, Presidente y Gerente del Grupo de Comunicación Sol de Canarias, Empresario Hostelero y Turístico, y Asesor Internacional de Países Africanos


