Los 75 niños y niñas de su Aldea de Rafah, en Gaza, se enfrentan a una amenaza inminente
Aldeas Infantiles SOS condena enérgicamente la violencia infligida a todos los niños, niñas y adolescentes atrapados en el conflicto en Oriente Próximo y lamenta profundamente la trágica muerte de varios niños, niñas y jóvenes de sus programas en Israel y en Gaza.
Aldeas Infantiles SOS opera en la Franja de Gaza, en Cisjordania y en Israel, proporcionando cuidado alternativo y apoyo a niños, niñas, jóvenes y familias en situación de vulnerabilidad. La Aldea Infantil SOS de Rafah, en Gaza, se enfrenta a una amenaza inminente para la seguridad de su personal y de los 75 niños y niñas a su cargo. Todos ellos, cuyas edades oscilan entre uno y trece años, se encuentran bien, pero con un acceso limitado a agua y alimentos.
En cuestión de días, miles de niños y niñas han sido asesinados y heridos en Gaza e Israel, y las cifras no dejan de aumentar. Asimismo, a medida que el número de víctimas mortales aumenta, cada vez más niños y niñas pierden trágicamente a sus padres y seres queridos. “Nos preocupa la vulnerabilidad de la infancia y la adolescencia sin cuidado parental y en riesgo de perderlo, cuya urgente necesidad de protección y asistencia humanitaria a menudo pasa desapercibida en tiempos de crisis”, afirman desde la organización.
Los niños, niñas y adolescentes son los que más sufrirán en este conflicto: huyen, no tienen un lugar seguro al que ir y no pueden satisfacer sus necesidades básicas de protección y alimentación. El trauma físico y mental será alto para todos ellos y aún mayor para aquellos que se encuentren solos, separados de sus familias o que han perdido el cuidado de sus padres. Antes de esta escalada de la violencia, el 80 % de los niños y niñas en Gaza ya sufría angustia emocional.
Aldeas Infantiles SOS pide un alto al fuego inmediato que permita el acceso de la ayuda humanitaria y urge a las partes involucradas a cumplir con el Derecho Internacional Humanitario y garantizar la protección de la infancia y la adolescencia, con especial atención a aquellos que han perdido el cuidado parental. Reclama, asimismo, las siguientes medidas inmediatas que aseguren el respeto de los derechos humanos:
1. Establecer un corredor humanitario que permita el paso seguro de ayuda y asistencia a los civiles en Gaza.
2. Crear zonas seguras en Gaza con servicios básicos, donde las personas puedan acceder a refugio, comida, agua y atención médica.
3. Permitir el paso seguro a Egipto, con derecho al retorno garantizado cuando sea seguro hacerlo.
4. Liberar a todos los rehenes. Nada puede justificar mantener a civiles como rehenes, algunos de los cuales son niños y ancianos.
5. Garantizar la rendición de cuentas por las violaciones del Derecho Internacional Humanitario para allanar el camino hacia una paz justa y duradera.
6. Detener las violaciones de los derechos de la infancia, incluyendo el asesinato y la mutilación, los ataques contra escuelas y hospitales, el secuestro y la negación de ayuda humanitaria.
Aldeas Infantiles SOS brinda apoyo a niños, niñas, jóvenes y familias con programas en Israel y la Franja de Gaza, así como en todos los países vecinos. Como en otras guerras, defiende los derechos de la infancia y la juventud y sigue los principios humanitarios de humanidad, imparcialidad, independencia y neutralidad.
Sobre Aldeas Infantiles SOS
Aldeas Infantiles SOS está presente en España desde 1967. Forma parte de una Federación Internacional fundada en 1949 en Austria, con presencia en 138 países (SOS Children’s Villages). En 2016 fue galardonada con el Premio Princesa de Asturias de la Concordia. Su misión es atender a niños, niñas y jóvenes que se encuentran en situación de vulnerabilidad, impulsando su desarrollo y autonomía mediante el acogimiento en entornos familiares protectores y el fortalecimiento de sus redes familiares, sociales y comunitarias. Trabaja para fortalecer a las familias vulnerables, de modo que puedan atender adecuadamente a sus hijos; protege a los niños y niñas que se han visto privados del cuidado parental, a los que brinda un entorno familiar protector en el que puedan crecer sintiéndose queridos y respetados, y acompaña a los jóvenes en su proceso de maduración e independencia.


