Darío López vuelve a Adeje con nuevas historias frescas, de esas que solo se entienden cuando tienes cuerpo de pibito pero alma de señor.
Soldecanarias.net / Redacciòn
Anécdotas cotidianas, observaciones absurdas y esa forma suya de ver el mundo que no cambia… aunque el cuerpo sí.
¿Traerá alguna sorpresa? Pues mire, no le vamos a decir que no. Porque hay cosas que no se pasan con la edad: la curiosidad, la torpeza, el arte de complicarse por gusto… y las ganas de echarse unas risas.
Mientras las plantas crecen y las frutas maduran, Darío no se hace ni más sabio ni más joven: simplemente está empuretando.


